Los principales objetivos fueron los de brindar una vivienda digna y confortable a familias de escasos recursos, y que además tuvieran entre sus integrantes a personas con capacidades motrices diferentes.
Por vivienda digna nos referimos a lo descrito por la ONU, aquella vivienda donde es posible el desarrollo familiar y personal a todos los niveles que la sociedad avanzada demanda.
Por vivienda confortable nos referimos a la iluminación, temperatura ideal, seguridad, medio ambiente, y por supuesto también la idea de belleza.
La accesibilidad otro de los puntos fundamentales señalados por la ONU, es tomar en consideración las necesidades de los grupos desfavorecidos y marginados.
Primeramente, previo un estudio, se seleccionó el distrito 12 de la ciudad, al ser uno de los distritos más pobres, pero que cuenta con los servicios básicos y equipamientos necesarios para la implantación del proyecto en uno de sus manzanos.
Propusimos una lotificación con lotes de 10 x 25 metros, en los cuales se implanta una vivienda que consta de dos unidades familiares independientes. La accesibilidad está garantizada por una rampa central compartida, y rampas en todos los desniveles.
La edificación se diseñó en altura para contrarrestar la baja densidad y dispersión poblacional de la ciudad, que encarece los servicios urbanos.
Utilizamos materiales locales, y dimos prioridad a la luz natural y a la ventilación, para ello optamos por una doble piel, la interna con amplios ventanales, y la externa de celosÃa de ladrillo visto, con un espacio jardÃn entre ambas que permite una mejor circulación de aire, las plantas del jardÃn y enredaderas mejoran el aire, y actúan como filtro del polvo.
Un jardÃn central a cielo abierto permite una mayor entrada de luz natural, mejora la circulación de aire, y la entrada de lluvia a este, ayuda a refrescar la casa.